Velorio en el Gallinero

Luego del escándalo que involucró a los intermediarios, dirigentes del fútbol argentino, clubes uruguayos, la AFA y la AFIP; el equipo quedó privado de algunos soldados. La promesa de que Piatti será el encargado de arreglar los problemas del mediocampo y la baja (sensible) de Estracqualursi nos hizo ir al Monumental de Núñez con un planteo extraño.

Noche fría y silenciosa a nuestro alrededor. La gente cumplió (nuevamente a pesar del operativo policial) y llenó las cómodas instalaciones del estadio.

El equipo salió a cuidar el resultado. Con 4 defensores (que terminaban siendo 5 ó 6; en el caso que Tellechea y/o Prósperi ayudaran en la marca), con un Bufarini de 5 y con Furch ayudando a Jara.

Si me preguntan por el partido, fue más intenso desde la pasión que desde el juego. Si me preguntan por el resultado, yo me fui satisfecho. San Lorenzo (apenas) mostró un poco más de juego colectivo con la pelota, con un rival que tenía más miedo a perder que nosotros. El partido se resume en algunos intentos de contragolpe de San Lorenzo respondiendo a centros (la mayoría pasados y a nadie) del rival.

El línea por línea: Un arquero que cumplió bien en las dos o tres que se lo requirió (el tema de hacer tiempo me incomoda muchísimo, pero con éste DT y arquero así son las reglas del juego). Una línea (mentirosa) de 4 defensores (donde Bianchi Arse fue su punto más alto, sacando y revoleando todo lo que se le cruzaba y un Kannemann que no fue el que nos tenía acostumbrados; Alvarado y Masuero cumplieron). En el medio Tellechea fue “funcional” de “stopper”, con un Bufarini con bastante marca pero poco juego (debido a su nueva posición), Aguiar con algo de marca y nada de pase o pegada en los tiros libres y Próseri que se marcó la vida, y hasta se dio el lujo de carriletear por su franja. Todo esto hizo del medio del Ciclón una masa de bastante quite y poco juego. Adelante Furch (de buen partido y un “casi gol”) reemplazó perfectamente a “Stracqua” y acompañó a Jara de buen papel.

Ahora hay que esperar a las “liberaciones” de los jugadores manchados por elusión fiscal y ver cómo se insertan en el juego de San Lorenzo. Kalinski y Mercier esta semana jugarán para la reserva para ganar minutos y roce futbolístico.

Cada partido es un nuevo San Lorenzo (quizás con las mismas limitaciones), con nombres y planteos a la medida de los recursos que se tienen a la mano. Los puntos van en alza, el juego está estancado… esperemos que podamos mejorar los parámetros y seamos un equipo que “entra” a la cancha a “jugar” fútbol.

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