Sin lugar a dudas este fin de semana vimos al mejor arquero del fútbol argentino en actividad y eso marcó el resultado final. El ex-ídolo del Club tapó 4 pelotas netas de gol.
Cuando de once titulares, sólo juega Mercier, algo de Kalinski y los pibes no hay chances de poder armar algo serio. Y si hablo de armar algo, no me refiero a una campaña de campeonato o similar; sino de (apenas) preparar un partido. Con estos jugadores, con este esquema (made in un DT que perdió la brújula) no hay chances de nada.
El partido de abrió rápidamente con un golazo del “pibe” Villalba. Parecía que el día le sonreía al Ciclón, pero a los pocos minutos, Racing lo empató y se perdió la chance de aprovechar el “efecto River” (único partido que San Lorenzo jugó BIEN y fue motivado por abrir el marcador rápidamente y luego esperar a que jugara el contrario).
Si consideramos que el arquero se comió algún gol, la paupérrima actuación de los cuatro “jugadores” de la defensa, más lo que “resta” Jara, es mejor empezar a seguir al equipo de Fútbol Femenino encabezado por Ricardo Saponare que seguramente nos dará más alegrías que este plantel de millonarios jugadores mediocres.
Punto aparte para el Pipi Romagnoli. Si el DT necesita de un jugador que va a empezar a sumar minutos luego de 8 MESES Y UNA SEMANA (11/08/2012 – 13/04/2013) de recuperación de una lesión grave para levantar un 3-1 en contra y de local, es una muestra más que clara que no hay rumbo, dirección u objetivo en mente.